Por qué descontinuamos el Nessy Letter

23 de agosto, 2022

Julio 2022 fue el último mes que escribimos el “Nessy Letter”, un newsletter mensual que reúne noticias y artículos que encontramos interesantes sobre salud + informática.

En este artículo voy a escribir las razones por las cuales comenzamos a escribirlo, por qué lo descontinuamos y los aprendizajes del proceso.

Por qué partimos con Nessy Letter

“Darnos a conocer y ver qué pasa en el proceso”

Con Eliana comenzamos a escribir en el Blog de Nessy en noviembre 2020, buscando publicar al menos una vez a la semana.

Nuestro objetivo era darnos a conocer en la vertical de salud, decirle al mundo que estábamos creando cosas, y en el camino entregar contenido de valor. No teníamos nada que vender, ningún servicio que ofrecer. Más bien queríamos compartir contenido y ver qué pasa.

El Nessy Letter tiene un origen parecido. Partimos agregando una sección al blog para que las personas interesadas se suscribieran: “Nessy Letter — Boletín sobre informática en salud. Compartiremos a tu correo todo lo que estamos aprendiendo de este mundo.”

La propuesta de valor es vaga, del estilo “Suscríbete para más”. Eso es porque solo queríamos ver qué pasaba si agregábamos la cajita.

Luego de ver que habían personas que se registraban pensamos: ¿qué pasa si compartimos mensualmente lo que vamos aprendiendo? Y así nació Nessy Letter.

Los resultados iniciales

En el periodo que estuvimos activos publicando en el blog y compartiendo en LinkedIn (noviembre 2020 - febrero 2021) de 582 visitantes, se suscribieron 7 personas. Ahí fue cuando decidimos enviar la primera edición.

Todo lo que puedo decir del resultado inicial fue que nadie se desuscribió 😁. No medimos las aperturas de correos ni los clicks, ya que esas métricas por sí solas (sin un objetivo de negocio por detrás) no vale la pena medirlas. Además, la caja de suscripción dice “respetamos tu privacidad”, y hay que ser consecuentes.

Por otro lado, la acción en sí de escribir el Newsletter me pareció entretenido. Además, me obligaba a tener que estar pendiente de noticias en el área.

Hasta ahí, todo bien.

Lo malo de no tener un objetivo muy claro desde el principio

Pasaron 18 ediciones para decir stop: “¿por qué estamos haciendo esto?”

Por un lado, creo que la decisión de partir un boletín mensual fue buena. Los Newsletter son una buena forma de compartir conocimiento, aprender y además se prestan para generar conversaciones interesantes.

Por otro lado, los resultados no fueron muy buenos. El origen del blog y del newsletter fue darnos a conocer en la vertical de salud. El blog cumplió su objetivo con creces, mientras que el Newsletter… ni idea.

Eliana consiguió su trabajo actual en gran parte gracias a distintas entradas que fue publicando. Por mi parte, se han contactado conmigo por distintos posts que he escrito, colegas me han recomendado para trabajos de tecnología en salud y posibles clientes me han encontrado por alguna entrada del blog.

Pero nada de lo anterior pasó gracias al Newsletter. Quizás este servicio amplificó el mensaje, pero ¿qué hubiese pasado si el tiempo invertido en el Newsletter lo invertíamos en escribir el Blog?

Parte del problema es no haber tenido un objetivo claro. Ojo no suscribo a la idea de que “si no sabes a dónde vas, no sabrás nunca si has llegado”. Soy más de la liga de hacer algo y ver qué pasa, estar abierto a las posibilidades que una acción te da. Sin embargo, hay que saber cuándo parar.

En este caso, el objetivo podría haber sido “hagamos 8 ediciones y veamos qué pasa”. Pero ni siquiera fue algo que consideramos. Entramos en modo automático y escribimos 18 ediciones 👍

¿Qué pasa si aumentamos la cantidad de lectores?

El Nessy Letter en un año consiguió cerca de 30 suscriptores. Si pocas personas leen, ¿cómo saber su utilidad?

Por eso siempre fui publicando en LinkedIn las distintas ediciones. De esa manera, al menos aumentaba la cantidad de personas que lo leían, o por lo bajo, que sabían que estaba escribiendo sobre la industria (esas publicaciones tuvieron al menos 600 impresiones cada una).

Luego pensé: ¿qué pasa si publico en un Newsletter de LinkedIn? Para inicios de año contaba con unos mil seguidores, entonces no partiría desde cero. Esta fue la forma más sencilla de aumentar los suscriptores que se me ocurrió.

Es por eso que la edición de Febrero 2022 la publiqué con la herramienta de Newsletter de LinkedIn, donde 300 personas se suscribieron y recibieron las siguientes ediciones hasta Julio 2022.

La decisión de no continuar

En mitad de Julio hablé con Eli sobre para qué queríamos seguir escribiendo el Newsletter, y no llegamos a una razón para continuar.

Algunas consideraciones:

  • Para darnos a conocer, tenemos el blog. Ha demostrado ser mucho más efectivo.
  • No tenemos un motivo para obligarnos a leer noticias y compartirlas, considerando que hay una inversión de tiempo ahí.
  • No tenemos una forma de medir el valor generado para la audiencia. Y aunque existiera, no hay valor para nosotros.

Como no llegamos a un buen motivo, decidimos pararlo.

Aprendizajes de haber escrito el Newsletter por más de un año

Te dejo algunos aprendizajes de haber escrito Nessy Letter por más de un año:

  • Es más difícil de lo que parece. Soy un consumidor de distintos Newsletter, y la verdad es que desde afuera se veía mucho más fácil. El proceso de recolección de noticias toma tiempo, así como también el de redacción. Yo diría que me tomaba al menos 4 horas, sin considerar el tiempo de edición de Eli.
  • Es una buena forma de obligarte a estar pendiente de las noticias relevantes en tu industria y además te permite darte a conocer sin necesidad de escribir contenido propio (como un blog).
  • Es difícil saber si estás haciendo las cosas bien. Yo diría que el “boca a boca”, que tu audiencia invite a sus pares o comparta tus ediciones, es un buen indicador. Así como también la cantidad de conversaciones que genera. Open Rate / Click rate son métricas de vanidad que por sí solas no sirven.
  • Intenta tener un objetivo. El de nosotros fue “darnos a conocer y ver qué pasa”. No es “SMART”, y no tiene por qué serlo. Sin embargo, creo que es clave colocar una limitante de tiempo para ver si se están cumpliendo tus expectativas.


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